:: Concierto de Stone Temple Pilots (31-Ago-08) ::

Después de una larga y tediosa espera en el puente internacional de Ysleta, las esperanzas de llegar a tiempo al evento se iban reduciendo, aún cuando el «vista» nos animó y nos hecho porras para llegar al esperado concierto de STP. Llegando 1 hora tarde, llegamos justo a tiempo. Solo nos perdimos la entrada de Black Rebel Motorcycle Club, y el placer de disfrutar una preciada «chela».

Solo 10 minutos después de nuestro arribo, el escenario apagó sus luces y una tonada de Led Zepellin comenzó a escucharse por la estructura de bocinas que colgaban a los costados del escenario. La gente se emociona, gritan, buscan confundidos rastros de los integrantes de la banda, pero lo único que reciben es un fuerte apagón repentino de luces y audio; Segundos mas tarde las luces se encienden lentamente revelando a Scott Weiland de pie frente al escenario con su sombrero y su camisa azul desfajada. No alcanzo a distinguir a los demás integrantes cuando llega Dean DeLeo y su Gibson roja con un slider en la mano y comienza a tocar Big Empty. El publico enloquece y una pantalla gigante detrás del escenario ilumina el coliseo con su despliegue de efectos visuales y luces muy apropiados a la rola.

El regreso de STP al escenario es muy natural, no parece que llevaban un lapso de 6 años sin tocar juntos, Weiland impregnó el escenario de la energía que lo caracteriza y cantó como los grandes. Dean DeLeo hizo también un excelente trabajo improvisando algunos intros y dejándose llevar con los solos de las canciones que la gente mas aclamaba, de igual forma Robert visitó las grúas con la «raza» varias veces e inclusive le prestó su bajo a un chavo que dejaron subir al escenario y lo dejó interpretar su melodía con Eric Kretz de fondo en la batería y Weiland en la voz. Maldito chamaco suertudo.

Definitivamente el momento cumbre fué cuando interpretaron Plush y de ahí la energía fue subiendo tanto en el escenario como en las butacas, incluso provocando algunos brincos y jaloneos de los gringos que son siempre tan sozos.

En general una excelente banda con un show muy intenso lleno de luces estroboscópicas y un escenario hipnotizante, dando uno de los mejores espectáculos que he visto en El Paso.

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