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Nuevo proyecto: Podcast

A partir de hoy en el menú estará el acceso a la descarga semanal de mi nuevo proyecto: Las verdaderas batallas del desierto. Un podcast hecho por talento local para todo el mundo. En éste nuevo proyecto pretendo mostrar a través de los talentos de la ciudad, la otra cara de Ciudad Juárez. Entrevistas con talentos de todos los ámbitos de la vida productiva de la ciudad, así como información y difusión de eventos culturales y familiares. Espero que sea de su agrado y que puedan repartirlo a todas las personas que estén interesadas en conocer a fondo sobre la vida en la ciudad.

Para descargar y escuchar el podcast, sólo den clic en la sección podcast del menú principal. O bien, pueden dar clic aquí para escuchar la primera entrega.

[podcast]http://www.canijochamaco.com/wp-content/gallery/lvbbd/LVBDD_T1-Ep01.mp3[/podcast]

Comments ( 3 )

  • kiuboleeeeee… bien, interesante… Bienvenida Fabiola al mundo de los 3 pesos jajaja, creo que ya somos bastantes, es mas, deberiamos de hacer un grupo con ese nombre. Creo que aca en el DF y Edo. Mex. la gente busca el freelance más por la cuestión de aumentar esos tres pesos, que otra cosa, es una buena manera de tener un segundo empleo y tener mas ganancia, y definitivamente bajan los costo de un servicio freelance que si contratas a una empresa.

    ¿Como hace la gente de allá para sobre llevar esta situación en la cual están viviendo? Solo puedo opinar a partir de lo que los MCM nos transmiten y no siempre es lo mas apegado a la realidad ¿Si se ha convertido en una zona de guerra como dicen, en donde ya es un peligro salir a las calles porque literalmente puedes caer muerto? ¿Cómo es un día normal de una persona normal en Ciudad Juárez? Se despiertan, se levantan y luego?… salen de sus casas esperando no encontrarse una balacera? ¿Cómo está afectando esta inseguridad a la otra cara de Ciudad Juárez?

  • Hola Aviña! Me da gusto que hayas escuchado el podcast. Cómo sobrellevamos esta situación? Pues la verdad es que sólo puedo hablar por mí misma. Y yo estoy en una situación en verdad privilegiada. Vivo en un lugar que se puede llamar seguro (una casa dentro de un fraccionamiento cerrado, con vigilancia las 24 hrs. y colindando con la mansión de los Zaragoza, quienes tienen una barda de 5 metros de alto y un metro de ancho, con picos y púas eléctricas). Tengo la suerte de no tener familiares y amigos que directamente estén conectados con el narco, de no tener una rutina de viajes diarios y también tengo la suerte de no tener más que 3 pesos (sabemos que ésto no es garantía de nada, pero se vuelve uno una carnada no tan apetitosa).
    Nuestra ciudad siempre ha vivido cíclicamente los efectos de la guerra entre narcos. Pero antes se mataban entre las cabezas de las bandas. Ahora se están exterminando en todos los niveles. Desde el que vende drogas en las escuelas, hasta el que las distribuye al mayoreo, hasta el que las compra, y ahora hasta las familias de los que no pagan por comprarla la llevan (niños, mujeres, viejitos…).
    Y bueno, también están las extorsiones a los negocios y las casas. Pero ni mi familia ni yo tenemos negocios llamativos. Mi mamá tiene una fonda sin teléfono en un mall. Y yo trabajo desde mi casa. Sí han ido a extorsionarlos al mall, pero por algún motivo les han dado el pitazo, y cierran todo y se van antes de que lleguen a pie los extorsionadores a quererles quitar lana.
    Y también lo que ha cambiado es que como en verdad hay tantas muertes, y en toda la ciudad, no hay día en que no te toque ver la escena de un crímen. Y esto causa que tengas que desviar tu camino y llegar tarde al trabajo. A mí no me ha tocado ver de primera vista un asesinato, pero ahora más de la mitad de mis conocidos o han visto un asesinato o les tocó que mataran donde comían o bailaban alguno. He tenido suerte.
    La ciudad antes estaba muy viva, de día y de noche. Pero ahora de noche es una ciudad casi fantasma.
    Y otra cosa a lo que nos hemos acostumbrado es a los militares. Yo no distingo entre municipales, estatales, federales o fuerzas especiales. Yo sólo sé que todo el día te topas con vehículos con gente armada. A mí no me gusta irme detrás de ellos, se me figura que se les va a salir una bala o algo.
    Y otro gran impacto es la cantidad de negocios cerrados. Eso nos ha perjudicado a todos. La extorsión y los secuestros han llevado a más de la mitad de los negocios de Juárez a cerrar, o a emigrar a El Paso. Ahora a El Paso le dicen Juárez, Texas.
    Y eso me lleva a otro gran cambio. Prácticamente toda mi familia de Juárez emigró a El Paso. Sólo nos quedamos los que no tenemos forma rápida (o dinero) para irnos para gringolandia. Bueno, también hay personas como mi mamá o los suegros de mi hermana Paula, que quieren luchar hasta el último instante por su ciudad. Y no se piensan mover.
    El Paso también ha cambiado. La gran cantidad de familias de Chihuahua que se han ido a El Paso (calculan como 3,000 familias), han causado un revuelo, a veces positivo (mucho $$$), a veces negativo (no quieren cumplir las reglas gringas). Y el shock cultural es tremendo. Antes nos veían como el vecino incómodo, que tenían que aguantar por el dinero que dejaba en su shopping. Ahora el vecino incómodo se mudó a vivir con ellos. Permanentemente. Lo padre es que ahora El Paso es paraíso para los restaurantes mexas. Tienen allá mil chihuahuenses que extrañan a morir sus burritos, paletas heladas, elotes rancheros. Y los listos y dinerosos están haciendo mucha lana.
    Llevo casi 20 años viviendo aquí. Y es la primera vez que veo este caos. Y espero, como todos los que seguimos aquí, que todo esto acabe pronto. Que se arreglen el narco y el gobierno. Y nos dejen vivir en paz.
    Bueno, también existe el deseo rosa de que se acabe el mercado negro de la droga (legalizándola quizás???) y todos vivamos felices para siempre.
    El futuro es incierto, pero yo sigo diciendo que hay esperanza. Todavía tengo familia y amigos en Juárez. Y salimos y nos divertimos. Y trabajamos y aprendemos. Y hacemos nuestra vida, tan normal como las circunstancias nos lo permiten. Lo único es que ahora nos forzan a tener un plan B de escape o supervivencia. Por si las moscas.
    Creo que me inspiré de más.
    Bueno, un abrazo y saludos desde Juárez.

  • Olvidé algo importante. El número de víctimas inocentes ha crecido. Y también el número de gente que por querer defender su libertad de expresión o proteger a sus seres queridos, han muerto en la lucha. Son las verdaderas pérdidas.

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